Pablo Vallejo es un balear de 29 años que según los expertos podría haberse situado entre los 10 mejores ajedrecistas del mundo con facilidad. A los 16 años se coronó como campeón mundial juvenil de ajedrez en lo que se consideró uno de sus primeros pasos hacia el éxito como ajedrecista de fama mundial, sin embargo el taoísmo se metió en su camino cambiándole los planes.
El tao de la salud, el sexo y la larga vida escrito por Daniel Reid, fue el libro que le descubrió a Vallejo una nueva visión de la vida y que lo llevo a abandonar el ajedrez al menos de forma profesional. Desde entonces, Vallejo sigue entrenando y participando para los torneos profesionales manteniendo un más que respetable vigésimo séptimo puesto en el ranking mundial pero con una actitud mucho más relajada:
Desde que leí ese libro pienso que hay que vivir la vida con cierta naturalidad. Excederse en cualquier cosa es malo. Tanto estudiar 12 horas ajedrez como tener 10 millones de euros en el banco. A mí esos asuntos no me quitan el sueño
Los expertos creen que podría llegar a ser una leyenda si se esforzará más (así lo parece demostrar su victoria sobre el número 1, el noruego Magnus Carlsen el pasado septiembre ) y algunos lo acusan de poco trabajador mientras Vallejo no hace nada por desmentir esta idea. Por ejemplo, Leontxo García, un periodista deportivo comentaba que cuando le preguntó a Vallejo tras el campeonato del mundo sub-18 si estaba dispuesto a esforzarse por llegar a estar entre los 10 mejores, Vallejo respondió simplemente que no.
Su entrenador por el contrario dice que no es poco trabajador sino que simplemente le falta la disciplina necesaria para mantener el entrenamiento que requiere un gran jugador mundial y él simplemente dice que no le importa todas las ventajas que podría conseguir y que es feliz tal como está.
Porque soy fan de Pablo Vallejo:
En esta ocasión, resulta un poco más difícil explicar que es lo que me atrajo de esta historia, de este joven Balear que a ojos de mucho se rindió y es demasiado vago para la grandeza. Sin embargo, yo lo veo de otra forma. Yo creo que Pablo Vallejo tuvo el valor y la sabiduría necesaria para saber lo que quería e ir a por ello, a pesar de las decepciones que podía causar en los demás, porque a veces renunciar a la ambición y quedarse con la simple felicidad es más difícil de lo que parece.
- Conocerse a si mismo. Pablo Vallejo descubrió que quería en su vida y cómo quería vivirla y fue a por ello. No se dejo influenciar por lo que otros pensaban que debía ser su vida y su felicidad.
- Sencillez: Saber lo que quiero conseguir y lo que quiero arriesgar para conseguirlo hace que las decisiones sean mucho más fáciles, bueno y saber apreciar las pequeñas cosas de la vida también ayuda.
- Superación personal: Vallejo está orgulloso de sus logros y no depende de la aprobación externa para sentirse a gusto con lo que ha conseguido o con lo que ha hecho.
- Bienestar y Serenidad: Porque una vez que has encontrado tu camino en la vida y estás dispuesto a seguirlo lo demás viene rodado.
Creo que eso es lo que más le envidio a Vallejo, tener las ideas tan claras acerca de lo que quiere ser su vida. Mientras los demás mortales seguimos luchando con las dudas, sed buenos y dejadme un comentario o si queréis podéis recomendarme alguien para la sección ¡Soy fan!
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